Diario de Clase
Aula:
086
Tutor/a:
Ríos, Julieta.
Cursante: Martorell, Ramón Félix.
Relato aquí una clase que tuve con los alumnos de un
3°año cuyo objetivo era introducir el tema de funciones. Comencé la clase
haciendo que los alumnos se repartan unas consignas muy sencillas tales como
escribir su número de calzado, su edad, su peso, su estatura, la cantidad de
sus hermanos, etc. en un papel y en forma individual. Todas apuntando a que se
identifiquen con un número en cada oportunidad a fin de reorganizar el curso de
distintas maneras según sea el criterio a seguir. Como por ejemplo: ¡Ahora nos
separamos según el número de calzado! Lo que llevó al curso a configurarse de
una manera, distinta a la que se dio cuando pedía otra consigna como ser
siguiendo su estatura. Después de varias “movilizaciones” (todas dentro del
curso) nos sentamos a discernir de alguna forma lo que acabábamos de hacer. La
idea original de lo que acabábamos de hacer era mostrar cómo una función reorganiza
un cierto conjunto numérico. Pero la explicación que intentaba dar en el
pizarrón -con ejemplos parecidos pero con conjuntos “más chicos”- apuntaba a
otra cosa; apuntaba a ver una función como una relación “especial” entre dos
conjuntos. Y ahí estuvo mi error: entreverar dos nociones de un mismo ente
matemático en una misma clase.
La
explicación terminó siendo poco entendible. Mientras trataba de explicar comencé
a hacer muchos cambios en los ejemplos dados, mientras mis alumnos entendían
menos. Fue poco fructífero. No recuerdo que decían mis alumnos, pero sí
recuerdo sus caras de desconcierto. Creo que aquí me falló la planificación,
pues no había preparado una explicación acorde a mis intenciones sino más bien acorde
a mis propias conclusiones. Es decir: los ejemplos me sirvieron a mí, pero no a
mis alumnos.
Otra situación
un poco más favorable fue cuando expliqué el concepto de pendiente de una recta
utilizando distintos registros. Ya había cursado el módulo de Enseñanza del
Álgebra y las Funciones en este postítulo, y aunque todavía no lo apruebo (lo
estoy recursando) ya me había quedado prendido con las conversiones entre
registros por sus beneficios a la hora de entender y dominar un concepto. Mis
alumnos ya estaban trabajando con rectas así que a mí solo me quedaba explicar
de una manera clara las distintas conversiones, es decir el correlato entre los
distintos registros. Esto lo comencé a hacer cuando, explicando en el pizarrón
la realización de un ejercicio de función lineal no faltaba el alumno que me
preguntara cómo paso de la fórmula a la gráfica o del gráfico a la fórmula. También
explicaba la ordenada al origen, pero sólo me referiré aquí a la explicación
que hice de la pendiente.
Pasar del
registro tabular al gráfico es relativamente fácil, pero el concepto de
pendiente prácticamente no aparece en esta situación. Sólo hacen falta como
mínimo dos puntos (bien tabulados) y la gráfica sale perfecta ubicando esos
puntos. Además ubicar al menos dos puntos pertenecientes a una recta no es nada
difícil para –a partir de allí- armar una tabla. Cosa que es poco probable que
se pida, aunque estaría bueno considerar. La cuestión es cuando partimos de una
ecuación -por ejemplo- del tipo r: y = mx + n (donde m es la pendiente) para
graficar una recta. Al definir la pendiente como m = ∆y/∆x todos mis alumnos quedaban
sorprendidos al ver este nuevo signo ∆, hasta que les explicaba que es sólo una
diferencia entre coordenadas de dos puntos pertenecientes a la recta dada. Es
decir: ∆y = y2 – y1 y ∆x = x2 – x1,
siendo P1 (x1, y1) y P2 (x2,
y2) puntos pertenecientes a r. Entendiendo lo anterior algunos ya
comenzaron a tener las cosas más claras, y al ver cómo explicaba los distintos
ejemplos usando el cambio de registro algunos llegaban a dominar la cuestión.
También mostraba que otra forma de definir la pendiente de una recta es como la
tangente del ángulo comprendido entre la recta y la dirección del eje x. Aquí
terminaba armando un triángulo rectángulo bajo la recta como el que muestro a
continuación, el cual facilitaba entender también la definición de la pendiente
como m = ∆y/∆x.

Imagen 01:
pendiente de una recta calculada como m = tgα = BC/AC = 3/1 = (4-1)/(1-0) = 3
Creo que
explicar un concepto desde distintos puntos de vista ayuda muchísimo a
entenderlo. El cambio de registro, cuando es posible, ayuda bastante y hasta me
animo a decir que es indispensable.